Así es que donde con más preocupación se vive "la traba" bancaria que paraliza la actividad consular cubana en EE.UU. es en la que viene siendo una floreciente industria desde que en 2008 el presidente Barack Obama resolviera relajar la estricta regulación de los viajes a Cuba: la de las agencias que gestionan esos vuelos. Se estima, que supera el medio millón de viajeros.

Desde EE.UU. a Cuba sólo viajan cubanoestadounidenses y quienes cuenten con una autorización del Departamento del Tesoro. En cualquier caso, todos ellos requieren una visa otorgada por la Sección de Intereses de Cuba, en Washington.

Por eso, para quienes tienen negocios que dependen de los vuelos de Estados Unidos a Cuba, es esencial que los cubanos retomen la actividad consular, o ya se temen lo peor.

"El futuro es bien incierto. Si no se arregla, tendríamos que cerrar, porque sin pasaportes ni visas, no hay viajeros", le dijo a BBC Mundo Viviane González, de la agencia de viajes Costa Cuba, una de las autorizadas por el Departamento del Tesoro a vender boletos a la isla.